WEBB, ganador sorpresa US OPEN
Simpson sorprendió con una victoria preparada el sábado (68 golpes) y rematada el domingo con otra cartulina de 68 (-2).
El norirlandés Graeme McDowell tuvo un último ‘putt’ de 7 metros para llevar el desenlace a un desempate el lunes, pero falló el golpe.
Simpson, el decimocuarto jugador del mundo y natural de Raleigh (Carolina del Norte), conquistó el torneo más difícil y extremo del golf -ganó con +1 en el acumulado-, en el segundo Open USA de su vida (debutó el año pasado en el Congressional).
Sobre el terrible campo del Olympic, el estadounidense encadenó una racha prodigiosa entre los hoyos sexto y décimo, con cuatro ‘birdies’ que le pusieron en la senda del éxito. Después y hasta el final de trayecto, Simpson se limitó a no tropezar. Coleccionó pares y se llevó el trofeo porque McDowell falló un último ‘putt’ de siete metros en el hoyo 18 para empatar.
Una leve sonrisa y un abrazo frío fue todo lo que supo expresar este joven jugador, seguramente atribulado por el momento, que en 2011 se estrenó en el circuito con dos victorias (Wyndham Championship y Deutsche Bank Championship).
Simpson levantó el trofeo ante el regocijo de los norteamericanos por recuperar el título tras dos años de éxitos europeos.
McDowell y el también jugador local Michael Thompson empataron en la segunda plaza, a un golpe, mientras que Jim Furyk, que comenzó desde el liderato, cayó hasta una concurrida cuarta plaza.
Tiger Woods tampoco puso un ápice de brillantez en su despedida (puesto número 21), ya que californiano firmó una tibia tarjeta de 73 golpes que escondió un comienzo horroroso (seis arriba en los seis primeros hoyos) pero un buen desenlace (tres abajo en diez hoyos).
Sergio García, el único de los españoles que sobrevivió al infierno del Olympic, puso un gris epílogo a su concurso con una tarjeta de 75 golpes (+5) para un trigésimo octavo puesto.