Golf & Gastro: Endulzantes a examen
Cuidarse físicamente es importante para todas las facetas de la vida diaria, así que seguir algunas pautas de alimentación y hábitos saludables pueden ayudarnos a disfrutar de jornadas de golf sin desfallecer en mitad del recorrido!
Uno de esos elementos a tener en cuenta es nuestra alimentación es el consumo de azucares. En los últimos años no han dejado de crecer las advertencias científicas que aseguran que el consumo excesivo de azúcares refinados tiene graves consecuencias para el organismo como la obesidad y la diabetes, entre otras. De hecho, la Organización Mundial de la Salud recomienda no superar los 50 gramos de azúcar al día y “tener en cuenta que el azúcar no debe aportar más del 10% de las calorías diarias de nuestra dieta, tanto en niños como en adultos”.
Ante esta situación, son muchas las personas que han subtituido el consumo de azúcar por endulzantes como la sacarina, la sucralosa o la stevia, entre otros. Pero ¿qué diferencias hay entre ellos? ¿Son todos de origen natural? ¿Pueden utilizarse para cocinar o para endulzar bebidas frías? Vamos a contar que nos ofrece cada uno…
SACARINA: Es el más antiguo de los edulcorantes y, en consecuencia, el que más fácilmente se encuentra en las cafeterías. Fue descubierta en 1879 por Constantin Fahlberg como un derivado del alquitrán. Y si bien fue aprobada para su consumo diario, su origen levantó muchas dudas entre parte de la comunidad científica, quien la testeó hasta lograr su prohibición entre 1972 y 1981. La razón de esto fue un estudio en ratas que desarrollaron cáncer de vejiga, pero la dosis utilizada era equivalente a 10.000 comprimidos diarios, por lo que se volvió a comercializar por falta de pruebas científicas.
Se trata de un producto artificial que se produce a partir de una sustancia que se encuentra en la uva. No tiene calorías aunque, en algunas ocasiones, produce un sabor residual metálico.
SUCRALOSA: A pesar de ser un endulzante que no lleva más de una década en el mercado, y que en España se comercializa bajo la marca Sucralin, ya tiene miles de adeptos en el mundo al tratarse de un producto de origen natural, elaborado a partir del azúcar. Y es que es el único endulzante, bajo en calorías, que está hecho a partir de la caña de azúcar, por lo que su sabor es muy similar al original. Otro de sus puntos fuertes es que, debido a su composición, es apto para el consumo de las personas que padecen diabetes, así como para niños, personas celíacas e intolerantes a la lactosa.
A diferencia de la gran mayoría de endulzantes presentes en el mercado, la estabilidad de Sucralin permite que sea utilizada como sustituta del azúcar en prácticamente todos los alimentos, bebidas frías y calientes, incluyendo las recetas caseras de cocción y horneado tanto tradicional como en microondas.
STEVIA: Originaria de Sudamérica, concretamente de Paraguay y Brasil, la Stevia es considerada la planta más dulce de la tierra y se cultiva en el Amazonas y otras partes del mundo. Se trata de un endulzante sin calorías de origen natural, que contiene minerales, vitaminas, oligoelementos y aceites volátiles que si se toman directamente de la planta sin procesar, le proporcionan una serie de propiedades nutricionales y medicinales.
Sin embargo, un inconveniente de los endulzantes elaborados a partir de la Stevia es que pueden tener un regusto amargo, que dista mucho del sabor del azúcar.
Ahora ya tenemos una idea más precisa acerca del mundo de los endulzantes…depende de cada uno que nadie nos «amargue» el paladar!